domingo, 25 de abril de 2021

Aprendiz





—Sabes qué es lo primero que el tiempo borra de un cadáver.

—No sé muy bien —respondió el novato.

—Los ojos.

—¿Y luego?

—El resto de la cara. Curioso ¿no?

—No sé —dijo despreocupado el neófito.

—Si los ojos son la ventana del alma, la ventana se cierra, el alma queda a oscuras y, como si fuera una planta, muere.

—Morimos doblemente.

—Seguro y además lo hacemos desnudos porque ya no se amortaja a nadie.

—Desnudos venimos al mundo. No me parece injusto lo de envolverlos en un sudario —expuso el aprendiz.

—Más bien inelegante, igual que el hecho de morir.

domingo, 18 de abril de 2021

Unipersonal



En aquel municipio había empadronado un solo habitante quien, además era alcalde electo por sí mismo y vecino único que contravenía las órdenes que aparecían en los edictos de la municipalidad. Así cuando estaba en desacuerdo con alguna normativa se iba a protestar a la casa del primer edil sin que ello causara ninguna alteración del orden público. Igualmente, cuando celebraba una sesión plenaria, todos los acuerdos se alcanzaban por mayoría absoluta, lo cual constituía una incuestionable paz social en el pueblo.

En cierta ocasión, el ayuntamiento le otorgó una licencia para construir un parterre donde colocar sus macetas y verlas florecer, aunque hubo de renunciar, después de ser acusado por su alter ego de corrupción urbanística ya que se beneficiaba del acuerdo.

Los bandos municipales consistían en largos exordios que nadie leía, a excepción de él que los escribía, inspirados en la Ilíada y desarrollados en igual número de quince mil versos homéricos.

Una vez a la semana abría la ventanilla de atención ciudadana que cerraba a los cinco minutos tras la ausencia de usuarios.

Cuando se marchó el último residente a la ciudad porque decía que el silencio era insoportable, tuvo que prescindir de los actos protocolarios como los desfiles, la entrega de medallas de oro, el libro de firmas ilustres y la izada de banderas.

Posteriormente a su fallecimiento, acontecido por un acceso de falta de popularidad y una pleuresía administrativa, el lugar fue declarado zona de despoblamiento rural.

En su honor, los servicios funerarios, a continuación de incinerarlo, guardaron sus cenizas en una hornacina del salón de plenos.



domingo, 11 de abril de 2021

Fetiches





Compró una paradoja como mascota para sus hijos. Ellos contentos le daban de comer contradicciones, incoherencias y antítesis. Creció y creció y se hizo tan grande que se produjo un hecho paradógico: la casa se llenó de sentido común.

sábado, 10 de abril de 2021

Insomnio



No podía dormir con el ruido que escuchaba junto al cabecero de su cama llegado desde el apartamento contiguo. Aunque más que el sonido sicalíptico, lo que perturbaba su descanso era la imagen que proyectaba en su cabeza. La de una joven pareja de vecinos follando sin parar a la que cada día saludaba al entrar o salir del edificio. Él muy flaco y ella de anchas cadera y trasero amplio, montada sobre su larguirucho compañero suministrando culatazos y enterrándolo con sus frondosas carnes, anegándolo en placer con su gordura, ahogando su endeblez en voluptuosidad carnal. 

A la mañana siguiente, en un cruce vecinal repentino, ojeroso y divertido, los saludó con una sonrisa que entendieron como parte de un trío sexual.



domingo, 4 de abril de 2021

Dualismos



El otro día hablé con mi cerebro. Me dijo que lo tenía preocupado. Le pregunté por qué y me respondió que no le hacía ningún caso. Le argumenté que eso era porque me ocultaba cosas, algo que entre personas que comparten su intimidad no da mucha confianza. Entonces me replicó que la mente tiene razones que el cuerpo no entiende.



Un tiempo único

    Nauplio Fernández observó, al despertar, que no se había movido de la cama en toda la noche. Entonces una idea iluminó su cerebro: e...