Lucía en su camiseta, con grandes caracteres negros, la leyenda: Take is easy. Parecía una advertencia o una intimidación, quizás parte de su acervo filosófico o de una reflexión profunda, el discurso existencial de quien debe ganarse el pan, o la dosis de droga, cada mañana. Cuando bajé del coche, entre curioso y asustado, el hombre me extendió la mano y me dijo: «dame algo que tengo hambre de letras».
domingo, 1 de enero de 2023
El gorrilla
Lucía en su camiseta, con grandes caracteres negros, la leyenda: Take is easy. Parecía una advertencia o una intimidación, quizás parte de su acervo filosófico o de una reflexión profunda, el discurso existencial de quien debe ganarse el pan, o la dosis de droga, cada mañana. Cuando bajé del coche, entre curioso y asustado, el hombre me extendió la mano y me dijo: «dame algo que tengo hambre de letras».
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Relaciones laborales
Tengo la fortuna de tener un jefe excepcional, que se desvive por nosotros y nos tiende la mano en todo momento. Es el alma de nuestra secci...
-
1 Andrea posó sus lábiles dedos sobre la octava baja del piano vertical y comenzó los ejercicios de quinto curso, como cada tarde entre l...
-
Heredero de la picaresca Jean-Luc se entrega a su destino y es capturado con un tiro en la pierna. Desconocemos su faz, pero sabemos, por la...
Para esos casos siempre llevo un diccionario de la rea en mi morral. Nunca falla.
ResponderEliminarTampoco lo aceptan.
Saludos,
J.